Mostrando entradas con la etiqueta Feromonas. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Feromonas. Mostrar todas las entradas

02 junio 2015

Cría de Reinas para principiantes - Queens breeding for beginners (Span and Eng).

El estudio de los hábitos naturales de sucesión dentro de las colmenas le ha permitido al hombre descubrir el modo de alterar la conducta de las abejas en pos de obtener una nueva reina. Los métodos más conocidos a lo largo de la historia, explicados, paso a paso alientan a todos a la producción de sus propias reinas.

LA CRÍA DE REINAS es una de las tareas apícolas que está envuelta en una nube de misterio en la que todos los apicultores que se inician quieren entrar y los que se encuentran en su interior guardan algún pequeño y profundo secreto. Lo cierto es que quien desarrolla esta actividad goza, entre sus colegas, de un cierto respeto y prestigio.

En la apicultura actual hay una verdadera conciencia respecto de la importancia de la selección de abejas para lograr cada día una producción más rentable y eficiente, ajustada a las necesidades de cada región apícola del país, como también para la obtención de un determinado producto o servicio llámese miel, polen, propóleos, jalea real o polinización.
Se sabe que en la mayoría de los casos hay solamente una reina por colmena, rodeada de miles de abejas y algunos cientos de zánganos. La madre de todos los habitantes de la colonia -la reina- debe mantenerse en un estado óptimo de postura que garantice no sólo la supervivencia de la colonia sino también la producción. Por ello resulta indispensable que las abejas (en forma natural) o el apicultor (en forma artificial) efectúen el recambio de la reina a tiempo.

La necesidad de reemplazo puede deberse a su muerte por envejecimiento, mala calidad, pérdida accidental o por enjambrazón. La ausencia de la monarca produce trastornos en el comportamiento de la colonia, fácilmente reconocibles por el apicultor experimentado mediante un zumbido característico. Además se produce inmediatamente la falta de feromonas (sustancia química que utilizan para comunicarse) lo que provoca un estado de irritación en las abejas. Al cabo de algunos días las obreras se ponen en campaña para la construcción de las celdas reales donde se formarán las nuevas reinas.

Uno de los grandes interrogantes de los apicultores novatos es de dónde salen los huevos para la futura soberana si la anterior reina -única que cumple tal función- ha desaparecido. Cualquier huevo fecundad sin nacer sirve para tal fin; pero en el caso que todos hayan nacido, las obreras recurren a las larvas que todavía no han. sido alimentadas con miel y polen, pues el secreto radica en que durante la etapa larval su dieta exclusiva sea Jalea real. A pesar de ello, cuando no encuentran una larva con una dieta semejante la sucesión del trono recae en la larva más joven de la colmena (Siempre y cuando no haya superado las 72 horas como larva). Está científicamente comprobado que mientras mayor sea la edad de la larva empleada para la obtención de una reina, menor será la calidad de la reina a obtenerse influyendo esto en la cantidad de óvulos que se formarán en las ovariolas de la reina

MULTIPLICACION. La heredera seleccionada antes de nacer, sufre un período de encierro dentro de la celda real que dura aproximadamente 16 días, según la raza que se trate. Cumplido ese período nace la soberana. Si por alguna razón (bajas temperaturas, deshidratación, falta de alimento en la colmena o falta de abejas) la larva muere y la colonia no tiene otra a quien recurrir, las obreras, hembras vírgenes se alimentarán con jalea real, este nutritivo alimento desarrollará sus ovarios transformándose en obreras ponedoras dando huevos de zánganos (fenómeno llamado partenogénesis); último recurso para que las características genéticas de la colonia trasciendan. En apicultura este fenómeno se conoce como colmena zanganera.

Desde los comienzos de la apicultura el hombre se dedicó a observar y descubrió, que por lo general, las abejas construyen varias celdas reales para garantizar su propia supervivencia, como consecuencia, en el momento del nacimiento es muy factible que nazcan varias reinas al mismo tiempo. En forma natural las abejas recién nacidas compiten por el trono en una lucha a muerte donde solamente queda una. El hombre al ver esto trató de obtener provecho de esa situación sacándolas de la colmena antes de la lucha.

El saber desarrollar reinas facilita en gran medida el crecimiento y el mejoramiento racional de la explotación apícola, por ello los criadores de abejas se preocuparon, a través del tiempo, en mejorar las técnicas para la obtención de reinas en forma artificial.

Un método recomendado para obtener gran cantidad de celdas reales (muchas veces superior a 20) consiste en .seleccionar una colonia por sus características de mansedumbre, alta capacidad de acopio, escasa enjambrazón y resistencia a las enfermedades, y extraerle la vieja reina al principio de la gran mielada (período dé máxima floración y de mayor entrada de néctar y polen a la colmena). Diez días después de haber eliminado a la reina, con mucho cuidado se extraen todas las celdas -menos la destinada a esa colmena- y se injertan en otras horfanizadas (como mínimo 48 horas para garantizar la aceptación de la celda), previo asegurarse el apicultor de que no queden huevos ni larvas menores.

En la actualidad muchos apicultores principiantes, por falta de experiencia y otros de edad avanzada con problemas de vista y pulso tembloroso creen que no pueden criar sus propias reinas a ellos van dedicados la descripción de los siguientes métodos.

METODO BENTLEY. Otra forma de producir celdas sin necesidad de buscar la reina es el "método Bentley". Está técnica consiste en introducir en un alza vacía por lo menos 6 cuadros de cría de todas las edades, extraídos de una colonia de características deseadas, Para que no le falte alimento proteico ni energético a ambos lados de los cuadros de cría se ubican un par de panales con miel, el resto de los panales de la cámara se completan con cuadros de cera estampada. Arriba de ella y separada por una entretapa ciega (que impida el paso de las abejas entre ambas alzas), se coloca una colmena bien poblada con una piquera independiente. Al cabo de 12 días se extraen del cuerpo inferior las celdas reales que se utilizarán para renovar las monarcas de otras colmenas y se separa el alza superior (que continúa con su reina original) del alza inferior (en la que se deja una celda real). Este método se basa en el aprovechamiento de las abejas pecoreadoras de la colonia superior que, al regresar de sus vuelos, ingresan encontrándose con la colmena inferior y al no encontrar a la reina comienzan a construir celdas reales.

Hasta 1960 el único método que se conocía para producir gran cantidad de realeras era si mular las condiciones de enjambrazón. La calidad de las celdas obtenidas con este método era buena, pero el problema estaba en la ubicación de las mismas, lo que muchas veces dificultaba la recolección, con el agravante del deterioro de la celda como del cuadro portador. Por esa razón, la mayoría de los productores de reinas optaron por alguno de los siguientes métodos para la obtención de realeras

METODO MILLER: Se basa en la introducción de un cuadro de cera estampa da con franjas de 5 a 7 centímetros de ancho que terminan hacia abajo en punta. Una vez preparado el material se lo introduce en la cámara de cría con la reina seleccionada para que las obreras estiren la cera y la reina coloque los huevos. Luego de una semana se traslada el cuadro, con las larvas recién nacidas, a una colmena criadora donde se realizará el estiramiento de las celdas reales. Diez días después varias estarán cerradas y listas para ser injertadas en la colonia destinataria.

  

METODO ALLEY: Se preparan lonjas de panal que contengan crías jóvenes de obrera y se fijan en la base de un cuadro más corto de lo normal o en un listón que se coloca dentro de un cuadro vacío (se recomienda destruir celda por medio para evitar que el amontonamiento dificulte su extracción). Posteriormente se introduce en la colonia huérfana que continuará el estiramiento de la celda real.

SISTEMA JENTER: En el Congreso de Apimondia realizado en 1987, los criadores de reinas quedaron sorprendidos con el sistema Jenter que obtuviera la medalla de oro. Esta técnica revolucionó la apicultura mundial al facilitar la crianza de reinas a pequeña y mediana escala al eliminar el uso de agujas de transferencia y dejar en el olvido los costosos laboratorios, luces y lupas especiales para ver larvas. Básicamente se trata de una caja 3,5 cm de fondo, 12 de ancho y 12 de alto que se coloca en un cuadro de la cámara de cría . El fondo es una tapa con 90 perforaciones donde se colocan 90 cúpulas (celdas) que más tarde recibirán los huevos fecundados por la reina. Simula una caja donde la reina se encuentra confinada y las abejas obreras tienen libre acceso, de tal forma que la soberana es alimentada y cuidada con normalidad . Una vez que la reina completa la postura en las cúpulas – al cabo de unas pocas horas – éstas se extraen por medio de un bastón y se transfieren sin riesgo al cuadro porta cúpulas donde concluye el proceso en una colmena continuadora encargada de estirar las celdas hasta el operculado. El proceso continua en forma similar al resto de los métodos.

  

Para especialistas: De todas las técnicas que hablan sobre el tema la más aceptada por los criadores de todo el mundo fue la presentada por Perret-Maisonneuve en 1888, mejorada por Doolitte 27 años más tarde. Este método se ha impuesto y continúa vigente por ser práctico, económico y porque produce reinas de alta calidad. Básicamente consiste en el uso de cúpulas (celdas artificiales de cera o plásticas) que se pegan sobre listones de madera y se colocan sobre marcos especiales, denominados "portacúpuas". Estos se introducen en colmenas huérfanas para que en un período que va desde 2 horas hasta un día las abejas fijen sustancias que estimulen a las demás abejas a trabajar sobre éstas (proceso de familiarización). El paso siguiente es el traslarve que consiste en introducir en las cúpulas larvas de obreras de 12 a 24 horas de vida, extraídas de la colonia madre por medio de una aguja de transferencia. Las cúpulas así preparadas son ofrecidas durante un lapso de 24 a 36 horas a las colmenas iniciadoras, que son las responsables de la aceptación de las larvas. De prosperar, se pasan luego a las colmenas continuadoras que, son las encargadas de terminar el proceso hasta el operculado de la celda real. La tarea que le queda al apicultor es sacarlas a tiempo para destinarlas a colmenas huérfanas.

Queens breeding for beginners.

The study of the natural habits of succession within the hives has allowed man to discover how to alter the behavior of bees after getting a new queen. The best known throughout history methods, explained, step by step encourage everyone to producing their own queens.

Queen rearing is one of the beekeeping tasks is enveloped in a cloud of mystery in which all beekeepers who want to get started and which are stored inside a small, secret. The truth is that those who develop this activity enjoys among his colleagues, a certain respect and prestige.

In today beekeeping is no real awareness of the importance of the selection of bees to accomplish each day more profitable and efficient production, tailored to the needs of the beekeeping region, as well as for obtaining a particular product or service call it honey, pollen, propolis, royal jelly or pollination.
It is known that there is only one queen per hive, surrounded by thousands of bees and some hundreds of drones in most cases. The mother of all the inhabitants of the colony-the queen should remain in a state of optimal position to ensure not only the survival of the colony but also production. It is therefore essential that bees (naturally) or the beekeeper (artificially) conduct the queen to spare time.

The need for replacement may be due to his death by aging, poor quality, accidental loss or swarming. The absence of the monarch produces disorders in the behavior of the colony, easily recognizable by the beekeeper experienced by a distinctive buzz. Besides it occurs immediately lack of pheromones (chemical they use to communicate) causing a state of irritation bees. After a few days the workers are put in campaign to build the actual cells where new queens will form.

One of the great questions of novice beekeepers is where they come from eggs for future sovereign queen -only if the above such function-compliant gone. Any egg fecundity unborn used for this purpose; but in the case that everyone is born, workers turn to larvae that have not. Was ali-mented with honey and pollen, because the secret is that during the larval stage its exclusive diet is Royal Jelly. However, when they find a larva with a similar diet succession to the throne rests with the younger larvae from the hive (As long as you have not exceeded 72 hours larva). It is scientifically proven that the greater the age of the larva used for the production of a queen, the lower the quality of the queen obtained influencing this in the number of eggs that will be formed in the Queen ovarioles

MULTIPLICATION. The selected heir before birth, undergoes a period of confinement within the actual cell that lasts about 16 days, according to the race question. Fulfilled that period born the sovereign. If for some reason (low temperature, dehydration, lack of food in the hive or lack of bees) the larva dies and the colony has no one to turn, workers, virgin females were fed with royal jelly, this nutrient develop its ovaries becoming egg laying workers giving drones (a phenomenon called parthenogenesis); last resort to the genetic characteristics of the colony transcend. Beekeeping This phenomenon it is known as zanganera hive.

Since the beginning of beekeeping man turned to watch and discovered that usually bees build several queen cells to ensure their own survival, therefore, at the time of birth it is very likely to be born several queens at the same time . Naturally newborn bees compete for the throne in a death struggle where only one left. Seeing this man tried to get out of that situation taking them out of the hive before the fight.

Knowing queens develop greatly facilitates rational growth and improvement of beekeeping, so the beekeepers worried, over time, to improve the techniques for obtaining queens artificially.

Recommended for a lot of queen cells (often exceeding 20) .Select method is a colony for their characteristics of meekness, high collection capacity, low swarming and disease resistance, and extract the old queen to top the large honeydew (peak flowering period and higher input nectar and pollen to the hive). Ten days after removing the queen, very carefully all the cells -less aimed at the hive and grafted onto other horfanizadas (at least 48 hours to ensure acceptance of the cell), after securing the beekeeper extracted that there are no eggs or larvae under.

Today many beginner beekeepers, for lack of experience and other elderly and visually impaired trembling hand believe they can not raise their own queens they are dedicated to the description of the following methods.

METHOD BENTLEY. Another way to produce cells without searching the queen is "Bentley method". This technique involves inserting a blank at least 6 brood of all ages, extracted from a colony of desired characteristics, rising Lest you on both sides of the brood missing protein and energy food are located a couple honeycomb with honey, the rest of the combs camera complete with boxes stamped wax. Above it and separated by a blind Entretapas (which prevents the passage of bees between the two hikes), a well populated hive with an independent runner is placed. After 12 days removed from the lower body the queen cells to be used for renew the monarchs of other hives and higher rise (which continues with its original Queen) from the bottom upwards is separated (in a real cell is left) . This method is based on the use of foraging bees from the upper colony, returning from their flights, encountering enter the lower hive and not finding the queen start building queen cells.

Until 1960 the only method known to produce many queen cells was whether bottlenose conditions swarming. The quality of the cells obtained with this method was good but the problem was the location of the same, which often made it difficult to harvest, exacerbated the deterioration of the cell as the carrier box. For that reason, most of the producers of queens chose one of the following methods for obtaining queen cells

METHOD MILLER: Based on the introduction of a box of wax stamp gives stripes 5-7 cm wide that end pointed down. Once the material is prepared feeds it into the brood chamber with the queen selected for workers stretch the wax and the queen put eggs. After a week the picture moves with the newly hatched larvae, a breeder hive where the queen cells stretching is performed. Ten days later, several will be closed and ready to be grafted in the target colony.

METHOD ALLEY: slices of honeycomb containing young pups working and fixed on the basis of a shorter frame than usual or in a bar that is placed inside an empty box (recommended destroying cell through to avoid are prepared to clutter hinders its extraction). Subsequently introduced into the orphan colony will continue stretching the actual cell.

JENTER SYSTM: In the Apimondia Congress held in 1987, the queen breeders were surprised with Jenter system that obtained the gold medal. This technique revolutionized the world beekeeping to facilitate the raising of queens to small and medium scale to eliminate the use of needles and do away into oblivion expensive laboratories, special lights and magnifiers to see larvae. Basically it is a box 3.5 cm deep, 12 wide and 12 high, which is placed in a box the brood chamber. The background is a lid with holes 90 where 90 domes standing (cells) which later receive the fertilized eggs by the queen. Simulates a case where the queen is confined and worker bees have free access, so that the sovereign is normally fed and cared for. Once the complete Queen's stance on domes - after a few hours - they are extracted by a cane and transferred safely to the picture carrier domes where it concludes the process in a responsible successor hive cells to stretch the operculado. The process continues similarly to the other methods.

For specialists: Of all the techniques that talk about the most accepted by breeders worldwide was presented by Perret-Maisonneuve in 1888, improved by Doolittle 27 years later. This method has been imposed and still in force to be practical, economical and because it produces high-quality queens. Basically it consists in the use of domes (wax or plastic artificial cells) sticking on wooden battens and placed on special frames, called "portacúpuas". These are placed in hives orphan for a period ranging from two hours to one day set substances that stimulate bees to other bees to work on these (familiarization process). The next step is the traslarve which comprises introducing into worker larvae domes 12 to 24 hours after birth, the mother colony drawn through a transfer needle. The domes thus prepared are offered for a period of 24-36 hours at the initiators hives, which are responsible for the acceptance of the larvae. If successful, are then passed to the successors hives, they are responsible for completing the process until operculado real cell. The remaining task is to get them out in time beekeeper to use as a orphan hives

18 julio 2014

La Abeja Melífera - The Honeybee (Spanish - English)

La Abeja Melífera -  The Honey Bee (Spanish - English)

Nombre Común : Abeja melífera, Abeja Europea.

Nombre Científico :  Apis mellifera  y subespecies (Insecta: Hymenoptera: Apidae)

La abeja melífera occidental, Apis mellifera , se produce de forma natural en Europa, Oriente Medio y África. Esta especie se ha subdividido en al menos 20 subespecies reconocidas (o razas), ninguna de las cuales son nativas de las Américas. Sin embargo, la subespecie de la abeja melífera occidental se han propagado ampliamente más allá de su área de distribución natural debido a los beneficios económicos relacionados con la polinización y la producción de miel.




En la Argentina, las abejas de miel “europeas” representan un complejo de varias subespecies cruzándose entre ellas; Apis mellifera ligustica , Apis mellifera carnica, Apis mellifera mellifera, Apis mellifera causcasia, y Apis mellifera Ibéricas. La introducción de estas subespecies se remonta a los primeros colonos Americanos en 1622. Más recientemente (finales de 1950), una subespecie de la abeja africana de la miel , Apis mellifera scutellata Lepeletier, que pueden cruzarse con subespecie europea se introdujo en las Américas.

El interés del público y la participación en la administración de la abeja de la miel (apicultura) se ha incrementado desde 2006, cuando la desaparición aguda de las abejas obreras de una colonia fue descrito como el trastorno del colapso de colonias. Desde entonces, los esfuerzos de investigación de todo el mundo se han centrado en mejorar la salud de las colonias y de las técnicas de gestión, y la identificación de las posibles causas del trastorno del colapso de colonias.
Distribución

Las razas europeas de Apis mellifera se han propagado ampliamente más allá de su área de distribución natural. En la actualidad, las abejas europeas se naturalizan en todos los continentes excepto en la Antártida.
Descripción

Como todos los himenópteros, las abejas tienen la determinación del sexo haplo-diploides. Los huevos no fertilizados (sin contribución genética paterna) se convierten en zánganos (machos), y los huevos fertilizados (tanto de la madre y de contribución genética paterna) se desarrollan en las hembras. Larvas hembras se alimentan con la dieta estándar de polen , néctar, con este alimento la cría se convierte en obreras adultas. Las larvas hembras alimentadas con una dieta rica en jalea real, el polen y el néctar pueden convertirse en reinas.

Las abejas obreras son hembras no reproductivas. Ellas son los más pequeñas en tamaño físico de las tres castas y sus cuerpos están especializados para el polen y la recolección de néctar. Ambas patas traseras de una abeja trabajadora tienen una corbicula (cesta de polen; . Fig. 1 ) especialmente diseñada para transportar grandes cantidades de polen a la colonia. Las Abejas obreras producen escalas de cera en la parte inferior de su abdomen. Las escalas se utilizan para construir el peine de cera dentro de la colonia ( . Fig. 2 ). Las obreras tienen un aguijón con púas que se debate, con el saco de veneno, desde el extremo de su abdomen cuando se despliega la picadura en una víctima. Esto da como resultado la muerte de la abeja obrera.



La abeja reina es la única hembra reproductora en la colonia durante circunstancias normales (algunas obreras pueden poner huevos no fertilizados masculinos en ausencia de una reina). Su cabeza y el tórax son similares en tamaño a la de la obrera. Sin embargo, la reina tiene un abdomen más largo y más gordo que la de una obrera. La reina también tiene un aguijónpero sus púas se reducen. En consecuencia, no se muere cuando lo utiliza.

Los zánganos son la casta masculina de las abejas melíferas. La cabeza y el tórax de los zánganos son más grandes que los de las castas femeninas, y sus grandes ojos parecen de moscas. Su abdomen es grueso y romo en el extremo, que aparece puntiagudo en el extremo como con las castas femeninas.

Todas las abejas pasan por una metamorfosis completa. Esto significa que tienen etapas de desarrollo distintas (huevo, larva, pupa y adulto; . Fig. 3 ). Tiempo de desarrollo típica de huevo a adulto varía según la casta. Los zánganos tienen el desarrollo más largo (24 días), las obreras son intermedias (21 días), y las reinas son las más rápidos (15-16 días).


Huevos: los huevos de abejas miden de 1 a 1,5 mm de largo y se ven como un pequeño grano de arroz. La reina pone los huevos en celdas de cera hexagonales individuales en el área de cría. Después de 3 días, los huevos eclosionan y las larvas emergen. Los huevos de las abejas de miel pueden ser difíciles de ver, pero su presencia indica una reina por el que se encuentra presente en la colonia (una herramienta muy útil al inspeccionar una colonia de abejas administrada).


Larvas: En la colonia de abejas, las larvas se conocen como “cría abierta” porque las células son destapadas. El número de días de la abeja de la miel pasa como larva varía según la casta (obrera: 6 días, zángano: 6,5 días, la reina: 5,5 días). Las larvas son de color blanco y en forma de “C” acurrucado en el fondo de sus celdas de cera. Cuando las larvas maduras están listas para mudar en pupas se extienden sus cuerpos en una posición vertical en la célula, y las obreras adultas que atienden a la cría cubren las larvas prepupal con una capa de cera.

Pupas: Debajo de la capa de cera, la miel de abeja prepupal larvas mudan en crisálidas. Las pupas permanecen bajo la cera tapadas hasta que se mudan a un adulto y mastican su camino fuera de la célula. Las pupas se conocen como “cría de obreras,” porque las células tienen un tope. Al igual que en la etapa larval, el tiempo de desarrollo de pupa varía según la casta (obrera: 12 días, zángano: 14,5 días, la reina: 8 días).

Adultos: las abejas adultas están cubiertas de pelos ramificados y se pueden dividir en tres regiones del cuerpo: cabeza, tórax y abdomen. Las características principales de la cabeza son los ojos compuestos y antenas. Dos pares de alas y tres pares de patas que se unen al tórax. Una delgada ‘cintura’ es creada por una constricción del segundo segmento abdominal. La característica externa más notable del abdomen es el aguijón. Sólo las abejas hembras tienen un aguijón, ya que se origina en un ovipositor modificado.

Las Abejas europeas no son fácilmente discriminadas de la raza de abejas africanas presentes en las Américas. Sin embargo, las abejas europeas son ligeramente más grandes que las abejas africanas. El personal de laboratorio utiliza los análisis morfométricos de venación de las alas y el tamaño de varias partes del cuerpo al diferenciar las abejas europeas con las abejas de miel africanizadas africanas. Además, el análisis genético puede distinguir e identificar cruce entre subespecies.
Biología

En la colonia de abejas, el trabajo se divide entre los individuos sobre la base de casta y edad. El único propósito de un zángano es aparearse con una reina virgen de otra colonia. La reina es la única que produce huevos en la colonia y es responsable de la producción de todos los descendientes de la colonia (hasta 1.500 huevos / día). Las Abejas obreras se llaman de esa manera porque realizan todas las tareas de mantenimiento de la colonia. Cada obrera realizará diferentes tareas exclusivamente en un orden predecible en función de su edad. Esto se llama politeísmo relacionada con la edad. Las obreras más jóvenes cuidan a las crías (huevos, larvas, pupas ), mientras que las obreras de edad construyen un panal, manejan las tiendas de alimentos dentro de la colonia, y protegen la entrada de la colonia. Las obreras más antiguas son cazadoras-recolectoras; éstas son las abejas de la miel que la gente encuentra más.

La cohesión de la colonia de abejas de la miel depende de una comunicación eficaz. Las abejas se comunican principalmente dentro de la colonia a través de señales químicas llamadas feromonas. Las obreras, los zánganos y las reinas tienen varias glándulas que producen feromonas. Estas feromonas son la feromona mandibular de la reina que permite a una colonia para detectar la presencia de sus reinas, feromonas de cría que señalan el tipo de atención requerida por las abejas inmaduras en la colonia, esta feromona comunica la ubicación de la colonia para las obreras que hayan sido desplazadas en una perturbación de la colonia.

Uno de los más notables comportamientos de las abejas de miel es su picadura. Es un comportamiento defensivo de las abejas obreras para proteger la colonia. Cuando se detecta un intruso en la colonia colonia, las abejas guardianas liberan una feromona de alarma que provoca una respuesta defensiva de la colonia. Por otra parte, cuando una abeja pica, libera feromonas de alarma para atraer más abejas a picar dando la ubicación de la picadura. Todas las abejas obreras mueren después de picar, y las europeos rara vez pican sin provocación.


Debido a su historia de vida altamente sociales, las colonias de abejas de miel pueden considerarse superorganismos. Esto significa toda la colonia, en lugar de las abejas individualmente, es visto como la unidad biológica. Con esto en mente, las abejas no se reproducen mediante la producción de más abejas individuales, sino más bien mediante la producción de más colonias. El proceso reproductivo de la creación de una nueva colonia se llama enjambre .

Las Abejas europeas normalmente pululan en la primavera y principios del verano, cuando los recursos de polen y néctar son abundantes. Para iniciar el proceso de enjambrazón, de 10 a 20 reinas hijas son producidas por la colonia. mientras que envían a las obreras a explorar en busca de un lugar para establecer una nueva colonia (típicamente una cavidad cerrada, como un hueco de un árbol).

Las reinas hijas en la colonia original, entonces emergen como adultos y luchan hasta que una sola reina sigue viva, a menos que una reina emerja antes que sus hermanas, en cuyo caso será cazar y matar a sus hermanas no nacidas. Después de un corto tiempo de maduración posterior, la reina hija restante sale de la colonia para aparearse con cerca de 15 zánganos. Todo el apareamiento se produce en las primeras 2 semanas de vida de una reina, en las afueras de la colmena y en el aire en áreas de congregación de zánganos . La reina entonces almacena el esperma recogido en su espermateca durante el resto de su vida. Una vez que se aparearon con éxito, la reina hija comienza a poner huevos, completando así las dos mitades del proceso de enjambrazón.

Las Abejas melíferas están adaptadas a los climas templados, donde hay sólo una corta temporada con generosas cantidades de polen y néctar disponible. Por esta razón, normalmente pululan sólo una vez al año.El resto de la primavera / verano se dedican a la recolección y almacenamiento de suficientes fuentes de néctar y polen para generar los depósitos de alimentos necesarios para sobrevivir a la caída y el invierno.

Este comportamiento de acaparamiento de recursos es lo que hace que las abejas europeas sean excelentes productores de miel. El néctar se recoge de las flores y se transforma en la miel a través de procesos enzimáticos y deshidratación dentro de la colonia. En este tiempo, la miel tiene un tope por encima del peine de cera en los que puede mantenerse fresco casi indefinidamente, dependiendo de la fuente de néctar original. Los apicultores y cazadores de miel pueden entonces recoger este panal de miel para el consumo humano.
Importancia Económica

Las abejas europeas son un componente establecido en la Argentina en el sistema agrícola . De hecho, la polinización por las abejas contribuye significativamente a la producción mundial de alimentos. Las abejas polinizan más que el 30% de los alimentos que comemos, y en los Estados Unidos estiman que las abejas polinizan hasta $ 15 mil millones del valor de los cultivos cada año. Además de proporcionar servicios de polinización, las abejas también producen otros productos que utilizan las personas incluyendo la miel, polen, cera, jalea real y propóleos.
Administración

El manejo de las abejas de la miel es muy popular en todo el mundo y varía mucho en el estilo y la escala. Los apicultores comerciales pueden mantener 2.000 o más colonias, mientras que un apicultor aficionado puede tener tan sólo una. El equipo utilizado para la extracción de colonias de abejas de miel también es muy diversa.

Patógenos de las abejas de la miel y las plagas se han extendido por todo el mundo con el movimiento de las abejas europeas. En la Argentina, las abejas europeas son susceptibles a una amplia gama de virus, hongos e infecciones bacterianas. Las abejas europeas también albergan plagas naturales, tales como los ácaros traqueales y polillas de la cera , y las introducidas, tales como pequeños escarabajos de la colmena (una plaga de abejas de África) y Varroa (un parásito de la abeja de la miel de Asia).


Los apicultores utilizan estrategias de manejo integrado de plagas para mantener los impactos de las numerosas plagas problemas relacionados con patógenos por debajo de un umbral aceptable. Algunos de estos métodos de control incluyen la selección de lugares adecuados para la colmena, alimentación suplementaria, atrapando las plagas en las colonias, la sustitución de las reinas, los tratamientos preventivos y de control químico.



The Honey Bee 

Common Name: Bee honey, European Bee. 

Scientific Name: Apis mellifera and subspecies (Insecta: Hymenoptera: Apidae) 

The western honey bee, Apis mellifera, occurs naturally in Europe, Middle East and Africa. This species has been subdivided into at least 20 recognized subspecies (or races), none of which are native to the Americas. However, the subspecies of the Western honey bee have spread widely beyond its natural range due to the economic benefits associated with pollination and honey production. 

In Argentina, the bees "European" honey represent a complex of several subspecies crossing between them; Ligustica Apis mellifera, Apis mellifera Carniolan, Apis mellifera mellifera, Apis mellifera causcasia and Apis mellifera Iberian. The introduction of these subspecies to the first American settlers back in 1622. More recently (late 1950), a subspecies of the African honey bee, Apis mellifera scutellata Lepeletier, you might come across European subspecies was introduced in the Americas. 

Public interest and participation in the administration of the honey bee (bee) has increased since 2006, when the acute disappearance of worker bees from a colony was described as colony collapse disorder. Since then, research efforts worldwide have focused on improving the health of the colonies and management techniques, and identification of possible causes of colony collapse disorder. 
distribution 

European races of Apis mellifera have spread widely beyond its natural range. At present, European bees are naturalized on every continent except Antarctica. 
description 

Like all Hymenoptera, bees have the determination of haplo-diploid sex. Unfertilized eggs (no paternal genetic contribution) become drones (males) and fertilized eggs (both maternal and paternal genetic contribution) develop in females. Female larvae fed the standard diet of pollen, nectar, this food becomes breeding adult workers. Female larvae fed a diet rich in royal jelly, pollen and nectar can become queens. 

Worker bees are breeding females. They are smaller in physical size of the three castes and their bodies are specialized for collecting pollen and nectar. Both hind legs of a busy bee have corbicula (pollen basket,. Fig. 1) specially designed to transport large amounts of pollen in the colony. The Worker bees produce wax scales in the lower part of your abdomen. Scales are used to build wax comb in the colony (. Fig. 2). Worker bees have a barbed stinger that struggles with the venom sac from the tip of her abdomen when the bite is deployed on a victim. This results in the death of the worker bee. 

The queen bee is the only breeding female in the colony during normal circumstances (some workers can lay eggs unfertilized male in the absence of a queen). Its head and thorax are similar in size to that of the working. However, the queen has a longer and fatter than a working abdomen. The Queen also has a aguijónpero its quills are reduced. Consequently, do not die when you use it. 

Drones are male honey bee caste. The head and thorax of the drones are larger than those of the female castes, and his big eyes seem to fly. His abdomen is thick and blunt at the end, that appears sharp in the end as the female castes. 

All bees undergo complete metamorphosis. This means they have distinct developmental stages (egg, larva, pupa and adult,. Fig. 3). Typical development time from egg to adult varies by breed. Drones have the longest development (24 days), workers are intermediate (21 days), and queens are faster (15-16 days). 

Eggs: Eggs Bees are 1 to 1.5 mm long and look like a small grain of rice. The queen lays eggs in individual hexagonal wax cells in the brood area. After 3 days, the eggs hatch and the larvae emerge. Eggs honey bees can be difficult to see, but their presence indicates a laying queen present in the colony (a very useful tool when inspecting a bee colony administered). 

Larvae: In the colony of bees, the larvae are known as "open breeding" because the cells are uncovered. The number of days of the honey bee larva passed as varies by breed (working 6 days Drone 6.5 days Queen 5.5 days). The larvae are white and "C" nestled in the back of their wax cells. When mature larvae are ready to molt into pupae their bodies extending in a vertical position in the cell, and adult workers attending the prepupal larvae rearing cover with a layer of wax. 

Pupae: Beneath the layer of wax, honey bee prepupal larvae molt into pupae. The pupae remain in the wax covered until moving into an adult and chew their way out of the cell. The pupae are called "brood," because the cells are capped. As in the larval stage, the pupal development time varies by caste (workers 12 days drone 14.5 days Queen: 8 days). 

Adults: adult bees are covered with branched hairs and can be divided into three body regions: head, thorax and abdomen. The main features of the head are the compound eyes and antennae. Two pairs of wings and three pairs of legs that are joined to the thorax. A thin 'waist' is created by a constriction of the second abdominal segment. The most notable feature is the external abdominal stinger. Only female bees have a stinger, it originated in a modified ovipositor. 

European bees are not easily discriminated from the present race of African bees in the Americas. But European bees are slightly larger than the African bees. Laboratory personnel used morphometric analysis of wing venation and size of various body parts to differentiate European bees with Africanized honey bees African. Additionally, genetic analysis can distinguish and identify cross between subspecies. 
biology 

In the bee colony, the work is divided between individuals on the basis of caste and age. The sole purpose of a drone is to mate with a virgin queen from another colony. The queen is the only one that produces eggs in the colony and is responsible for the production of all the descendants of the colony (up to 1,500 eggs / day). The worker bees are called that way because they perform all maintenance of the colony. Each working exclusively performed different tasks in a predictable order based on their age. This is called age-related polytheism. Younger workers care for the brood (eggs, larvae, pupae), while older workers build a hive, handle food stores within the colony and protect the entrance of the colony. Older workers are hunter-gatherer; these are the honey bees that people find more. 

The cohesion of the colony of honey bees depends on effective communication. Bees communicate primarily within the colony through chemical signals called pheromones. The workers, drones and queens have several glands that produce pheromones. These pheromones are the queen mandibular pheromone that allows a colony for the presence of their queens, brood pheromones that signal the type of care required by immature bees in the colony, this pheromone communicates the location of the colony for workers who have been displaced in a disturbance of the colony. 

One of the most remarkable behaviors of honey bees is their bite. It is a defensive behavior of worker bees to protect the colony. When an intruder is detected in the colony colony, the guard bees release an alarm pheromone that causes a defensive response of the colony. Moreover, when a bee stings, it releases alarm pheromones to attract more bees to sting giving the location of the bite. All worker bees die after stinging, and rarely bite unprovoked European time. 

Due to its history of highly social life, colonies of honey bees can be considered superorganisms. This means the entire colony, rather than individual bees, is seen as the biological unit. With this in mind, the bees do not reproduce by producing more individual bees, but rather by producing more colonies. The reproductive process of creating a new colony called swarm. 

European Bees usually swarm in the spring and early summer, when pollen and nectar resources are abundant. To begin the process of swarming, 10 to 20 daughters queens are produced by the colony. while the workers sent to explore for a place to establish a new colony (typically a closed cavity, like a hollow tree). 

Daughters queens in the original colony, then emerge as adults and struggle until a single queen is still alive, unless a queen emerge before their sisters, in which case it will hunt and kill their unborn sisters. After a short time later maturation, remaining daughter queen leaves the colony to mate with about 15 drones. All mating occurs in the first 2 weeks of life of a queen outside the hive and into the air in drone congregation areas. The queen then stores the collected sperm in her spermatheca for the rest of his life. Once successfully mated, the queen begins to lay eggs daughter, completing the two halves of the swarming process. 

The honey bees are adapted to temperate climates, where there is only a short season with generous amounts of pollen and nectar available. For this reason, normally swarm only once a year.The rest of the spring / summer are devoted to the collection and storage of sufficient sources of nectar and pollen to attract deposits of food needed to survive the fall and winter. 

This behavior of grabbing resources is what makes European bees are great honey producers. The nectar collected from flowers and transformed into honey through enzymatic processes and dehydration within the colony. At this time, honey has a ceiling above the wax comb where it can stay fresh almost indefinitely, depending on the original source of nectar. Beekeepers and honey hunters can then pick up this honeycomb for human consumption. 
Economic Importance 

European bees are established in Argentina in the farming system component. In fact, pollination by bees contributes significantly to global food production. Bees pollinate more than 30% of the food we eat, and in the United States estimated that bees pollinate up to $ 15 billion worth of crops each year. In addition to providing pollination, bees also produce other products that people use including honey, pollen, beeswax, royal jelly and propolis. 
administration 

The management of honey bees is very popular around the world and vary greatly in style and scale. Commercial beekeepers can hold 2,000 or more colonies, while an amateur beekeeper can have just one. The equipment used for the extraction of honey bee colonies is also very diverse. 

Pathogens of honey bees and pests have spread worldwide by movement of European bees. In Argentina European bees are subject to a wide range of viral, fungal and bacterial infections. European honeybees are also home to natural pests such as tracheal mites and wax moths, and introduced, such as small hive beetles (a plague of bees Africa) and Varroa (a parasite of the honey bee Asia). 

Beekeepers use strategies of integrated pest management to keep the impacts of the many problems associated with pathogenic pests below an acceptable threshold. Some of these control methods include the selection of suitable sites for the hive, supplementary feeding, trapping pests in the colonies, replacement queens, preventive treatments and chemical control.

30 octubre 2013

Teorias sobre la Enjambrazón - Theories on Swarming (Spanish - English)

Teorias sobre la Enjambrazón - Theories on Swarming.

Existen diversas teorías en relación con los mecanismos o estímulos que desencadenan la “fiebre de enjambrazón”. Las más citadas y aceptadas por los diferentes autores son las siguientes:
1.- Falta de espacio
2.- Temperatura de la colonia
3.- Hormonal o de las ferormonas
4.- Desequilibrio entre abejas nodrizas y pecoreadoras.
5.- Sanitario
6.- Instintivo de raza o genético.
7.- Climatológico
8.- Idiopatico

1.- Teoría de la falta de espacio
Es, sin ninguna duda la más antigua de todas, y que tiene menos base científica. Se basa en suponer que la enjambrazón se produce ante una aumento de la población de abejas, que superaría la capacidad de la colmena en la que están situadas, o la de los cuadros de cera que están trabajando.
En base a esta teoría se proponía combatir la enjambrazón dando mas espacio a la colmena, mediante la adición de alzas y cuadros con cera. La experiencia demuestra que es una medida paliativa que no consigue frenar la “fiebre de enjambrazón”.

2.- Teoría de la temperatura de la colonia
Algunos apicultores han intentado relacionar incrementos en la temperatura interior de la colonia con la enjambrazón. De hecho el termino “fiebre de la enjambrazón” se debe a que se determinó que en el momento de la salida del enjambre la temperatura interior de la colonia estaba entorno a los 40 grados centígrados.
Por ello se propugnaba “poner las colmenas a la sombra” o protegerlas durante los periodos de calor del verano.

3.- Teoría hormonal o de las ferormonas
Las ferormonas son sustancias de naturaleza hormonal, volátiles, que son segregadas por todas las especies vivas, que mediante una impresión del sentido del olfato dan lugar a una determinada conducta y que cumplen diversas funciones, que incluyen desde la identificación de los individuos de una determinada colonia o especie hasta aspectos relacionados con la conducta sexual.
Se han identificado diferentes tipos de ferormonas segregadas tanto por las abejas como por la propia reina.
La teoría de las ferormonas en la “fiebre de la enjambrazón” tiene su base en la segregación por parte de la reina de una feromona, denominada “feromona real”, que es segregada por las glándulas mandibulares de la reina en condiciones normales y que actúa como factor de cohesión de la colonia. Variaciones en el nivel de secreción de esta feromona podrían estar relacionadas con la enjambrazón y con la estimulación para producir nuevas reinas.
El nivel de secreción –intensidad y tal vez otras cualidades de la feromona real- parecen estar en relación con la edad de la reina. Cuando la reina es vieja, el nivel de secreción es muy bajo, pudiendo llegar incluso a desaparecer.
Por tanto, a partir de esta teoría podemos actuar sobre “la enjambrazón" :
Edad de las reinas, evitando tener reinas muy envejecidas, lo que por otra parte influye sobre la puesta, ya que esta decae también con la edad. Según estimaciones en colonias con reina de 1 año de edad enjambran el 20%, a la edad de 2 años el 40% y las de más de 2 hasta el 80%. Sin embargo el solo hecho de la edad de la reina no explica suficientemente la enjambrazón, porque aparte de la variación en el nivel de secreción de feromona (cuestión no medida aún por ningún autor) podrían intervenir otros factores como es el número de huevos que pone la reina, y por tanto el número de abejas pecoreadoras en la colonia en relación con las nodrizas (lo que podríamos llamar el índice de reposición) que como se sabe va decayendo con la edad.

4.- Desequilibrio entre abejas nodrizas y pecoreadoras.
Posiblemente la teoría mejor fundamentada en cuanto a las causas de la enjambrazón es la del apicultor alemán Gerstung, que afirma se debe a la pérdida de un cierto equilibrio en la colonia entre el número de abejas nodrizas y pecoreadoras, a favor de las primeras, de tal forma que cuando este se rompe, por un incremento importante en el número de abejas nodrizas, se produce la enjambrazón.

5.- Sanitario
Es sabido que en determinadas condiciones sanitarias, o por deficiencias en la colmena o habitáculo de la colonia, se produce un abandono que aunque no puede ser calificado en puridad como una enjambrazón, sin embargo ocasiona la perdida de mayor o menor cantidad de abejas, en ocasiones sin que quede ninguna en la antigua colonia. En otros casos queda un pequeño número de abejas con su correspondiente reina. La intensidad de este abandono o “pseudoenjambrazón” depende del motivo sanitario que induce a la colonia a esta huida, que obedece más a un deseo de supervivencia que a un instinto de multiplicación.
En general las diferentes enfermedades y parasitosis, cuando alcanzan un determinado umbral, frente al cual la colonia se encuentra impotente para controlarlo, dan lugar a este abandono. Entre las causas sanitarias más frecuentes se encuentran:
- Deficiencias mecánicas o físicas en la colmena, como son excesiva abertura de piquera, tablas rotas que dan lugar a pérdidas de calor o entrada de agentes extraños.
- Varroasis.
- Polilla.
- Nosemiasis.
- Loque, europea y americana.
- Invasión por agentes extraños, como son ratones de campo, topos, musaraña, etc.
Por tanto el control de estas enfermedades y situaciones es la mejor manera de evitar la pérdida de la colonia.

6.- Instintivo, de raza o genético.
Se han identificado determinadas razas o subespecies de abejas que tienen una mayor tendencia a la producción de enjambres.

7.- Climatológico
La abundancia de néctar es un factor que incide de diversas maneras en la enjambrazón. Pero además las floraciones “fuera de época”, unidas a temperaturas anormalmente altas para una determinada temporada, son circunstancias que generan un cierto desconcierto en la colonia e inducen a la enjambrazón. Se ha relacionado esta situación con el actual cambio climático, conocido como “calentamiento del planeta”, fenómeno del que lamentablemente estamos asistiendo solo a su inicio, y que según algunos expertos dará lugar a profundas modificaciones en el hábitat de la tierra.

8.- Idiopático
El término “idiopático”, muy utilizado en las ciencias de la salud y la naturaleza, se usa para describir fenómenos o situaciones cuyo origen es aún desconocido, En el mismo sentido podríamos utilizarlo en apicultura para describir aquella “fiebre de enjambrazón” para la que no somos capaces de encontrar una causa objetiva que permita comprender el por qué se produce.

Conclusión
El fenómeno de la enjambrazón es el mecanismo natural e instintivo para la división o multiplicación de ese ser vivo y unitario que llamamos colonia de abejas. Con independencia de causas externas, como las sanitarias, su control solo es posible si conocemos los mecanismos íntimos que lo desencadenan.
Los métodos mas utilizados para controlar la enjambrazón, como son el dar un mayor espacio a la colonia, protegerla del sol en verano, suministrar panales con cera laminada o ya estirada o el destruir cada siete días las realeras construidas por una colonia que quiere enjambrar, no son útiles, y pueden acarrear serios perjuicios, dado que en ningún caso con estos métodos se consigue frenar “la fiebre de la enjambrazón" pudiendo incluso ocurrir que a base de destruir realeras, la colonia enjambre dejando una población huérfana. La creación de enjambres artificiales tampoco es totalmente efectiva, dado que siempre es posible que se produzcan enjambres naturales (primarios o secundarios) además de la partición de la colonia que artificialmente producimos, con el consiguiente “doble o triple” debilitamiento de la colonia madre.

Theories on Swarming - Theories on Swarming .


There are several theories regarding the mechanisms or stimuli that trigger the "swarming fever". The most cited and accepted by different authors are as follows:
1.- Lack of space
2.- Temperature of the colony
3.- Hormonal or of pheromones
4.- Imbalance between nurse bees and foragers.
5.- Health
6.- Instinctive breed or genetic.
7.- Climatological
8.- Idiopathic

1.- Theory of lack of space. 

It is without doubt the oldest of all , and has less scientific basis. It is based on the assumption that the Swarming occurs before an increase in the population of bees, which would exceed the capacity of the hive in which they are located, or the wax boxes are working .Based on this theory proposed swarming combat giving more space to the hive , by adding wax ups and pictures . Experience shows that it is a palliative measure that fails to stop the " swarming fever ".

2.- Theory colony temperature. 

Some beekeepers have tried to link increases in temperature inside the colony swarming. In fact the term " swarming fever " is because it was determined that at the time of departure of the swarm the interior of the colony temperature was around 40 degrees Celsius .It is therefore advocated "putting hives in the shade " or protect them during periods of summer heat.

3.- Theory of pheromones hormonal or. 

The pheromones are substances of hormonal nature , volatile , which are secreted by all living species , which means an impression of sense of smell lead to a certain behavior and have diverse functions , ranging from the identification of individuals of a particular colony or species to variables related to sexual behavior.Different types have been identified in both pheromones secreted by bees as the queen herself .The theory of pheromones in the " swarming fever " is based on segregation by the queen of a pheromone , called " Real pheromone " , which is secreted by the mandibular glands of the queen in normal and acting as a factor of cohesion of the colony. Changes in the level of secretion of this pheromone could be related to the swarm and to stimulation to produce new queens .The secretion - intensity level and perhaps other qualities of the actual pheromone - appear to be related to the age of the queen. When the queen is old, the level of secretion is very low , but could even disappear .Therefore, from this theory we can act on " swarming " :Age of queens, queens avoiding having very aged , which moreover influences the start , as this also declines with age. Estimates in colonies with queen swarm 1 year old 20% , at the age of 2 years and 40% over 2 to 80 % . However, the mere fact of the age of the queen does not sufficiently explain the swarming , because apart from the variation in the level of secretion of pheromone ( yet unmeasured issue no author ) could involve other factors such as the number of eggs laid the queen, and therefore the number of foraging bees in the colony in relation to nurses ( what might be called the replacement ratio ) which is known to be declining with age.

4.- Imbalance between nurse bees and foragers. 

Possibly the best grounded theory as to the causes of swarming is the German beekeeper Gerstung , which says the loss is due to a certain balance in the colony between the number of nurse bees and foragers , in favor of the first , of such that when it is broken by an increase in the number of nurse bees swarming occurs.

5.- Health. 

It is known that in certain health conditions , or deficiencies in the interior of the hive or colony , an abandonment that though not strictly speaking can be described as a swarm , however causes loss of greater or lesser amount of bees in times without leaving any in the former colony . In other cases is a small number of its corresponding queen bees . The intensity of this neglect or " pseudoenjambrazón " health depends on the reason which induces the colony to this flight, that is due more to a desire for survival an instinct of multiplication.In general the different diseases and parasites , when they reach a certain threshold , against which the colony is powerless to control , leading to this abandonment . Among the most frequent causes are sanitary :- Mechanical or physical deficiencies in the hive , such as excessive opening runner , broken boards leading to heat loss or entry of foreign agents.- Varroa .- Moth .- Nosema .- Foulbrood , European and American .- Invasion by foreign agents, such as voles, moles, shrews , etc. .Therefore the control of these diseases and conditions is the best way to avoid loss of the colony.

6.- Instinctive , race or genetic. 

Have identified certain races or subspecies of bees have a greater tendency to produce swarms .

7.- Climatological. 

The abundance of nectar is a factor that influences in various ways in the swarm . But also blooms " out of date " , together with abnormally high temperatures for a season , are circumstances that create a certain confusion in the colony and induce swarming. It has linked this with the current climate change, known as "Global Warming " , a phenomenon that unfortunately we are seeing only the beginning, and which some experts will lead to profound changes in the habitat of the earth.

8.- Idiopathic. The term " idiopathic " , widely used in the health sciences and nature, is used to describe phenomena or situations whose origin is still unknown, in the same sense we could use in beekeeping to describe that " swarming fever " for which we fail to find an objective reason for understanding why it occurs.


Conclusion. 

The phenomenon of swarming is the natural and instinctive mechanism for division or multiplication of living and unit that we call bee colony . Regardless of external causes , such as health , control is only possible if we know the intimate mechanisms that trigger .The most used methods to control swarming , such as giving more space to the colony , protect from the sun in summer , provide laminated or wax honeycombs and stretched or every seven days to destroy queen cells built by a colony that wants swarming , not useful , and can cause serious damage , since in any case with these methods achieve slow " swarming fever " may even happen that destroy queen cells based on the colony swarm leaving orphan population . creating swarms is not fully effective artificial , since it is always possible that natural swarms occur ( primary or secondary ) in addition to the partition of the colony to produce artificially , thus "double or triple" weakening of the mother colony.

06 septiembre 2013

LA CRIA DE ABEJAS REINAS - THE QUEEN BREEDING

LA CRIA DE ABEJAS REINAS - THE QUEEN BREEDING Por: ERNESTO GUZMÁN NOVOA (guzman.ernesto@inifap.gob.mx)

I. INTRODUCCION A LA CRIA DE ABEJAS REINAS

La cría de abejas reinas es una actividad especializada de la apicultura que requiere de conocimientos de la biología de las abejas y de considerable experiencia práctica. Criar reinas es necesario para la explotación. Se requiere de reinas jóvenes y genéticamente buenas para que las colonias sean productivas, dóciles y saludables; por eso la cría y el cambio de reinas son hoy día prácticas apícolas muy importantes. Si las reinas no se cambian, la producción no solo bajará por no contarse con reinas jóvenes, sino que además las poblaciones de abejas tenderán a africanizarse con el paso del tiempo, lo cual es perjudicial para la producción y para el mantenimiento de abejas manejables. Con el cambio anual de reinas, la producción de miel aumenta entre 15 y 30%, debido a que las reinas menores de 12 meses ponen al menos 30% más huevos que las reinas de más de un año de edad y es bien sabido que las colonias que poseen más abejas durante la floración son más productivas. Así se demostró en estudios realizados en diversas partes del mundo. Además de lo anterior, las colonias que tienen reinas jóvenes, tienen una menor tendencia a enjambrar.
La mayoría de las reinas de colonias comerciales son reemplazadas al cumplir el año de edad. Es recomendable cambiar las reinas de todas las colonias cada año o dos años y por eso se requiere comprarlas o producirlas.
Producirlas es más barato que comprarlas y por ello una mejor alternativa, siempre y cuando se cuente con un buen pie de cría (reinas progenitoras). Contar con buen pie de cría es fundamental, porque de este dependerá las características deseables e indeseables de nuestras futuras colonias.
Dado que no todas las reinas son aceptadas, es necesario producir más reinas de las que se requieren y si un apicultor puede producir muchas reinas, también puede vender sus excedentes, lo que dará ingresos adicionales.

II. BIOLOGIA REPRODUCTIVA DE LA ABEJA REINA
Longevidad de las reinas. La literatura menciona que las reinas pueden vivir varios años; sin embargo, estas aseveraciones están fundamentadas en muy pocos trabajos experimentales, la mayoría de los cuales se realizaron en países de climas templados y fríos. El trabajo que monitoreó la longevidad de un mayor número de reinas en el mundo, fue el que Guzmán Novoa y colaboradores llevaron a cabo en el estado de México.
Producción natural de abejas reinas. Para criar reinas de calidad, hay que imitar las condiciones naturales en las que se forma una nueva reina y para ello hay que entender la biología de las abejas. Una nueva reina es producida en una colonia en forma natural solamente bajo tres condiciones: 1) cuando la reina ha muerto (horfandad), 2) cuando la colonia se dispone a enjambrar y 3) cuando la reina va a ser reemplazada porque no pone bien, es vieja, o no produce suficientes feromonas.
Para diferenciar cada uno de estos casos, primero hay que buscar huevos en las celdillas y también hay que buscar a la reina. En caso de no encontrarlos, se trata de horfandad. Cuando la colonia se prepara para enjambrar, esta se encuentra por lo general muy poblada y el número de celdas reales es mayor a seis. Cuando las obreras de una colonia quieren reemplazar a la reina, la colonia por lo general está débil y el número de celdas reales construidas es menor de seis.
Las tres castas de abejas que existen en una colonia: obreras, reinas y zánganos, se desarrollan a partir del mismo huevo puesto por una reina. Los zánganos surgen de un huevo no fertilizado (por partenogénesis), mientras que las reinas y obreras surgen de un huevo fertilizado. Los factores que diferencian el desarrollo de una reina o de una obrera del mismo huevo, son el tipo de celda y la alimentación. Una futura reina se desarrolla en una celda real, que es más grande que una celda de obrera y su alimentación es exclusivamente a base de jalea real, mientras que las futuras obreras reciben una papilla elaborada con polen y néctar, que es menos nutritiva. Las mejores reinas son las que se desarrollan a partir de larvas recién eclosionadas, ya que reciben una mayor cantidad de jalea real, lo que trae como consecuencia que sean de mayor tamaño y con ovarios más grandes, por lo que potencialmente pueden poner más huevos. Para que esto suceda, las larvas que serán futuras reinas, deben recibir abundante cantidad de jalea real en forma constante desde el momento en que salen del huevo. Una reina se desarrolla en solo 15 a 16 días, mientras que una obrera tarda de 20 a 21. Esto se debe a la mejor y mayor alimentación que la reina recibe. La metamorfosis (cambio de forma) de la futura reina incluye las etapas de huevo (tres días), larva (cinco y medio a seis días) y pupa (seis y medio a siete días). Pasadas estas etapas, la reina emerge como individuo adulto.
Después de emerger de su celda, una reina virgen es alimentada por las obreras y posteriormente se desplaza por la colmena en busca de otras posibles celdas reales o reinas. Cuando lo hace, en muchas ocasiónes emite un sonido parecido a un silbido de corta duración que se cree sirve para intimidar a otras reinas que pudieran ser sus rivales potenciales. Si encuentra otras celdas reales, hace un hueco con sus mandíbulas en una pared de estas y clava su aguijón en las reinas en desarrollo. Posteriormente las obreras destruyen las celdas y retiran los cadáveres.
De encontrarse con otra reina ya emergida, se entabla una lucha hasta que una de las dos reinas muere. Las reinas pueden picar a sus rivales sin perder el aguijón, ya que este es curvo y liso.
La joven reina efectúa su primer vuelo de apareamiento o vuelo "nupcial” al cabo de cuatro a 10 días de emergida. La reina continúa realizando vuelos nupciales durante dos a siete días, dependiendo de las condiciones ambientales externas. Si las condiciones son malas, puede tardar más tiempo en su etapa de apareamientos.
En total la reina efectúa entre uno y cinco vuelos nupciales durante este periodo de su vida y nunca más lo vuelve a hacer. Cada vuelo dura entre cinco y treinta minutos y los apareamientos ocurren en el aire, a una distancia de entre uno y cinco km de la colmena de la reina, en las llamadas zonas de congregación de zánganos. En estas zonas, las reinas se aparean con uno a 17 zánganos. Las reinas almacenan semen de todos los machos con los que se aparean en un órgano de reserva que se llama espermateca y que tienen en el abdomen. De esta manera, las reinas aseguran la fertilización de huevos hasta por varios años. Las reinas empiezan a poner huevos dos a cuatro días después de su último vuelo de apareamiento. Las reinas son alimentadas por las obreras exclusivamente con jalea real por el resto de sus vidas, lo que asegura una buena postura. Las reinas pueden poner entre 500 y 2,500 huevos al día, dependiendo de varios factores, entre los que se encuentran la época del año, la fortaleza de la colonia, el origen genético de la reina, la afluencia de alimentos, etc.
Las reinas africanizadas ponen más que las europeas.
Los zánganos en la reproducción. Los zánganos proceden de huevos no fertilizados debido al fenómeno de la partenogénesis, por lo que son solo hijos de la reina y no tienen padre. Los zánganos llevan la mitad de los cromosomas (material genético) que tienen las hembras. Por eso puede pensarse en ellos como gametos masculinos de otra reina. Los zánganos emergen luego de 24 días de desarrollo y alcanzan la madurez sexual entre los 10 y 14 días. A partir de esa edad, los zánganos realizan vuelos de aproximadamente 30 minutos de duración, en busca de reinas vírgenes que visiten las zonas de congregación. Tienen ojos grandes y un buen olfato para detectarlas, ya que estas liberan feromonas, que son sustancias (“perfumes”) que tienen la función de atraer a los machos. Los zánganos mueren luego de aparearse porque sus genitales se fracturan y quedan alojados en la vagina de la reina. Estos genitales son visibles a simple vista y se les denomina “signo de apareamiento.” En ocasiones, es posible observar reinas regresando de vuelos nupciales, entrando a su núcleo o colmena con una estructura blanquecina saliendo de la cámara del aguijón (el signo de apareamiento).
El número de zánganos presentes en las colmenas es mayor cuando hay floración y es menor durante las épocas de escasez. Por ello la mayor parte de los apareamientos ocurren en épocas cercanas a las floraciones. Los zánganos buscan zonas de congregación localizadas a una distancia de entre uno y siete km de su colmena. Este conocimiento es fundamental, para ubicar colmenas productoras de zánganos seleccionados en sitios estratégicos en la periferia de los criaderos de reinas.

III. RAZAS Y GENOTIPOS DE ABEJAS
Es difícil saber cuantas razas de abejas existen en el mundo, pero se han reconocido al menos 30. Todas las razas y genotipos tienen pros y contras y su desempeño es diferente en diferentes regiones; por eso es recomendable contar con reinas de genotipos bien adaptados a las condiciones ecológicas donde se pretenden utilizar. Si bien es cierto que la calidad genética de las reinas es importante, resulta mucho más importante que las colonias de abejas reciban un buen manejo. De nada sirve tener reinas de buen origen genético si el manejo es malo. En la producción de miel influye más el manejo que la raza o genotipo de las abejas que se utilice.
Razas de abejas. Las razas de abejas recomendables como pie de cría son las europeas. Las más apropiadas son las abejas de las razas italiana, carniola y caucásica. En general puede decirse que las abejas italianas y las carniolas son las más productivas y por eso son las mayormente preferidas por los apicultores de casi todo el mundo. Las abejas italianas tienen una mayor tendencia a picar y a pillar que las carniolas y caucásicas; sin embargo, son más tolerantes a enfermedades de la cría. Las abejas carniolas tienen una mayor tendencia a la enjambrazón que las italianas, mientras que las caucásicas tienen una alta tendencia a colectar propóleo.
Genotipos de abejas. Las anteriores son generalizaciones de las características de razas de abejas europeas, las cuales son muy difíciles de encontrar en forma pura, aún en países donde no hay abejas africanizadas. En los Estados Unidos por ejemplo, se reconoce que las razas están mezcladas en cierto grado. Por eso lo importante es, más que pensar en una raza en particular, pensar en un genotipo de abejas con características particulares; alta producción, baja agresividad, baja enjambrazón, sanidad etc.

IV. EQUIPO Y MATERIALES PARA LA CRIA DE ABEJAS REINAS
La cría de abejas reinas es una actividad especializada y por eso requiere de equipo especial, aunque también se utiliza equipo para producción de miel. El equipo más costoso son los llamados núcleos de fecundación, aunque también se utilizan jaulas para encerrar a las reinas progenitoras junto con panales (para obligarlas a poner), bases artificiales para celdas reales (copa-celdas), bastidores para sostener las copa-celdas, agujas de traslarve, colmenas para incubación de celdas, jaulas para el transporte e introducción de reinas, tijeras, pintura, colmenas para guardar reinas fecundadas (bancos), canastas para transportar abejas obreras, etc. Las copa-celdas pueden ser de plástico o de cera natural. Las primeras pueden adquirirse en una casa de implementos apícolas y las segundas se fabrican por el criador con moldes especiales de madera, que también pueden comprarse o hacerse. Las copa-celdas sirven para recibir larvas jóvenes que son transferidas de una celdilla de obrera a su interior, por medio de una aguja de traslarve. Las copaceldas conteniendo larvas son montadas en bastidores que se introducen en una colonia huérfana y fuertemente poblada con obreras jóvenes (colmena criadora) para que ahí se transformen en celdas reales.
En los núcleos de fecundación se introducen celdas reales maduras y sirven para que en ellos emerjan reinas virgenes y regresen a los mismos después de aparearse. En un sentido estricto, son mini colmenas. Su tamaño es variable, dependiendo de las necesidades del criador, pero siempre es menor que el de una colmena normal. En algunos sitios se manejan algunos muy pequeños o más grandes que consisten en una cámara de cría dividida en tres espacios (tres núcleos); también se utilizan alzas divididas en tres espacios, o cajas individuales para tres o cuatro bastidores de cámara de cría.
Las jaulas de transporte e introducción tienen el propósito de guardar a la reina y de servir para su introducción a colmenas horfanizadas (a las que se les elimina la reina). Generalmente las jaulas están hechas de madera cubiertas por una malla fina, aunque también pueden ser de plástico. La pintura sirve para marcar a las reinas y las tijeras para cortarles una ala, una véz que están fecundadas. Las colmenas para guardar reinas fecundadas hasta su utilización o venta, son unidades huérfanas que se conocen con el nombre de bancos de reinas.

V. FUNDAMENTOS DE LA CRIA DE ABEJAS REINAS
Los fundamentos para la cría de reinas fueron establecidos hace más de 100 años, con el conocimiento acumulado de la partenogénesis (capacidad de la reina para poner huevos no fertilizados que dan lugar a zánganos), del beneficio de la espemateca de la reina (órgano de almacenaje de espermatozoides de los machos con los que la reina se aparea), de que las reinas se producen por horfandad, enjambrazón, o reemplazo y de que éstas se aparean en el aire. El criador de reinas tiene que imitar las condiciones naturales de una manera artificial, para aprovechar la necesidad de las abejas de desarrollar una reina. Esto lo hace proveyendo larvas jóvenes a una colonia carente de reina y llena de obreras jóvenes, donde se introducen celdas artificiales conteniendo larvitas seleccionadas. También el criador emula una colonia huérfana de tamaño estándar, al establecer núcleos de fecundación o al hacer divisiónes para introducirles celdas reales.

VI. METODOS SIMPLES PARA LA CRIA DE ABEJAS REINAS
El método más simple para criar reinas es dejando a una colonia huérfana y esperando a que las obreras construyan celdas reales. Una división sin introducir una reina es un ejemplo de esto. Otros métodos incluyen el "Miller" y el "Alley."
Método Miller. Para este método, se instala media hoja de cera estampada sujeta al cabezal superior de un bastidor sin alambrar y este bastidor se introduce al centro de la cámara de cría de una colonia que contenga una reina de buenas características (madre progenitora). Este cuadro se coloca entre dos bastidores de cría chica. Si en la colonia existen panales vacíos, hay que sacarlos de la colmena y sustituirlos por otros con miel o cría operculada, para que la reina no se distraiga poniendo en otros panales vacíos y se concentre en el que le damos. La colonia se alimenta fuertemente con jarabe de agua y azúcar a partes iguales y al cabo de siete a 10 días, este marco (con el panal ya construido) es retirado. En la parte inferior del panal y con la ayuda de un cuchillo (de preferencia previamente calentado), se cortan puntas en forma de triangulo y se destruyen en forma alternada dos de cada tres celdas (aplastando sus paredes) que contengan huevos, para dar espacio a las futuras celdas reales. Las puntas triangulares del panal favorecen la construcción de celdas reales por parte de las abejas. Hecho esto, el cuadro se introduce en una colonia huérfana y fuertemente poblada, la cual construirá varias celdas reales que luego pueden ser introducidas en núcleos o en colonias horfanizadas.
Método Alley. Para este método, se proporciona un panal nuevo y vacío a la colonia con la mejor reina con que se cuente. Esta colonia se alimenta y al cabo de cuatro días se retira el panal. En las celdillas del panal habrán muchas larvas recién eclosionadas. Con la ayuda de un cuchillo previamente calentado se cortan tiras del panal del ancho de una celda que contengan larvas recién eclosionadas.
Posteriormente se siguen grupos de tres celdas a lo largo de la tira y se destruyen progresivamente (sin cortar la tira) dos celdas con larvas, dejando una intacta. Estas tiras se pegan con cera caliente al borde inferior de un panal recortado en forma curva (a media altura del bastidor), de tal suerte que las celdillas con las larvas miren hacia la parte inferior del marco. Este bastidor se introduce a una colonia huérfana y fuerte, para que sus abejas desarrollen celdas reales.

VII. METODOS DE PRODUCCION MASIVA DE ABEJAS REINAS
Los métodos para la cría comercial de abejas reinas fueron establecidos por Doolittle en 1888 y han sufrido pocas modificaciones sustanciales desde entonces.
Estos métodos consisten de cuatro etapas en las que se efectúan una serie de procedimientos. Las etapas son: 1) el traslarve, 2) la producción de celdas reales, 3) la cosecha y cuidados de las celdas reales y 4) la fecundación y cosecha de las reinas.
Las copa-celdas artificiales. Las copa-celdas artificiales donde se introducen las larvas seleccionadas pueden ser de plástico o de cera y pueden comprarse en casas comerciales por millar. Otra opción es fabricarlas uno mismo. Para hacerlo, hay que usar cera de la mejor calidad, como la obtenida de opérculos. No es conveniente usar cera obtenida de panales viejos. El diámetro de las copa-celdas debe ser similar al de celdas reales naturales, o sea aproximadamente 8 a 9 mm. También la profundidad de las copas debe tener esta medida. El fondo de las celdas debe ser redondeado y bien liso. Para hacerlas se utilizan moldes de madera, uno de cuyos extremos tenga estas medidas y que además esté marcado (con una muesca circular) a 8-9 mm de distancia a partir de su punta. La punta del molde para fabricar las copaceldas debe ser muy lisa y redondeada, lo cual se logra con la ayuda de una lija de grano muy fino. Para producir muchas celdas a la vez, se ponen juntos varios de estos moldes y se sumergen al mismo tiempo en cera líquida. Es importante que antes de sumergir los moldes en la cera, estos se remojen en agua jabonosa (unos 15 a 30 minutos), para poder desprender las copa-celdas con facilidad después de que se enfrían. La cera se calienta en baño maría sobre una parrilla eléctrica o de gas, cuidando que no hierva, para que mantenga su calidad. Existen baños maría para este propósito de venta en casas de implementos apícolas. Alternativamente, puede usarse un sartén eléctrico con termostato en lugar del baño maría. El procedimiento consiste en sumergir el o los moldes en la cera líquida hasta la marca de los 8-9 mm y luego sacarlo y dejar enfriar en el aire la copa-celda por unos segundos. Hay que repetir el proceso de introducir y sacar el molde en la cera por dos a cuatro ocasiones más. Cada vez que el molde se sumerja en la cera, deberá hacerse a un mm de menor profundidad consecutivamente, para producir copa-celdas de fondo grueso y paredes delgadas. Para desprender las copa-celdas de los moldes, estos se sumergen en agua fría donde se dejan reposar por unos segundos, al cabo de los cuales las copas se desprenden, realizando un ligero movimiento giratorio sobre ellas con los dedos pulgar e índice. Antes de producir la siguiente copa-celda, es necesario volver a remojar el molde en agua por algunos segundos y secarle para después volverlo a meter en la cera derretida. Cuando se trabaja con un solo molde, pueden fabricarse de tres a cinco celdas por minuto.
El marco contenedor de copa-celdas. Las copa-celdas artificiales se pegan a una tira (listón) de madera en número de 15 a 18 y se instalan dos o tres de estas tiras en un bastidor de medidas estándar, pero con los postes laterales desplazados unos cm más hacia el centro del marco, en relación a un bastidor de cámara de cría. Estos listones de madera deben espaciarse verticalmente dentro del bastidor, a una distancia suficiente que permita el desarrollo de las celdas reales entre ellos. El bastidor contenedor debe tener muescas en el interior de sus postes laterales, para poder fijar ahí las tiras de madera que llevan las copa-celdas.
Para pegar las copas, primero se vacía cera derretida sobre las tiras y luego se presionan sobre estas con la ayuda de un molde para hacer copa-celdas. Hay que dejar un espacio de 2 a 2.5 cm entre las copas. Otra opción consiste en colocar tiras delgadas de cera estampada sobre los listones de madera, las cuales se fijan por presión con los dedos, luego de exponerlas al sol para calentarlas y suavizarlas un poco. Las copas también se fijan por presión sobre la tira de cera estampada.
Finalmente, se agrega más cera líquida (con una cuchara) alrededor de las copas para fijarlas mejor. Algunos criadores de reinas pegan pequeñas bases de madera de forma cilíndrica, o cuadritos de lámina a las tiras, usando cera derretida. Después, pegan las copas a estas bases con cera derretida, para que una vez desarrolladas las celdas reales, se desprendan junto con la base. Estas bases facilitan la sujeción de las celdas reales cuando son introducidas a colmenas o núcleos de fecundación.
Hay criadores que meten el marco contenedor con las copa-celdas vacías a la colmena criadora 12 a 24 horas antes de realizar el traslarve, con la idea de que las obreras las pulan y les impregnen su olor particular, porque piensan que con esto se mejora la aceptación de las larvas y el número de celdas producidas. Sin embargo, no se ha demostrado que esta práctica en realidad represente una ventaja, en comparación a introducir el marco ya con las larvas transplantadas en el interior de las copas.
Las reinas progenitoras. Es muy importante contar con un método confiable de selección que permita identificar a las mejores reinas madre, para que estas sean las proveedoras de las larvas que serán las futuras reinas de nuestras colonias, ya que ellas son los reservorios de las características que se heredan y como es lógico, se requieren buenas características en nuestras abejas. El número de reinas progenitoras a seleccionar depende del tamaño de la operación. Sin embargo, se recomienda traslarvar de por lo menos cinco madres si los apareamientos de las reinas hijas ocurrirán en el aire y de por lo menos quince si se utiliza un esquema de apareamientos controlado (inseminación instrumental o apareamiento en islas) y en población cerrada (apareamientos entre miembros del mismo tipo de abejas). Este número mínimo de madres es necesario para evitar problemas asociados con la consanguinidad (alto grado de parentesco), como es la baja viabilidad de la cría o una mayor susceptibilidad de las abejas a enfermarse.
Las larvas que se transfieran deberán tener menos de 36 horas de eclosionadas (salidas del huevo), de preferencia menos de 24, ya que se busca que estén bien alimentadas con jalea real. Para identificar las larvas de la edad adecuada, se requiere de buena vista y de cierta experiencia, o bien de encerrar a la reina durante cuatro a cinco días en una jaula con malla de criba, conteniendo un panal vacío. Al cabo de este tiempo, se contará con una abundante cantidad de larvas de la edad adecuada para el traslarve. Cualquiera que sea el método que se use, es crucial utilizar larvas de menos de 48 horas de eclosión, porque si se usan larvas de mayor edad, se corre el riesgo de que emerjan reinas antes de tiempo y maten a todas las demás que aún estén en las celdas reales dentro de la colonia criadora. Además, larvas de mayor edad producen reinas de calidad inferior. Una vez que el panal con las larvas de la edad adecuada haya sido seleccionado, hay que llevarlo al sitio donde vaya a realizarse el traslarve.
El traslarve. El traslarve es simplemente el paso o transferencia de una larva de una celdilla de un panal, a una copa-celda artificial. El traslarve debe hacerse en un lugar con sombra y donde no peguen corrientes de aire, para evitar que las larvas se enfríen o se sequen. Hay apicultores que lo hacen bajo la sombra de un árbol y hay otros que lo hacen en el interior de una habitación. Siempre hay que tomar en cuenta que tanto temperatura como humedad bajas, pueden afectar considerablemente la sobre vivencia de las larvas. Si la región donde se traslarva es muy seca, es mejor poner una toalla humedecida con agua tibia sobre el bastidor, dejando descubierta únicamente la sección del panal donde se estén obteniendo larvas, e ir destapando progresivamente el bastidor, conforme se vayan necesitando más larvas. Se puede usar una lámpara de luz fluorescente o una lámpara de minero para ver bien las larvas en el interior de las celdillas, pero esto puede deshidratarlas un poco. También pueden usarse lentes de aumento o una lupa si esto mejora el trabajo de traslarve.
Antes de hacer el traslarve, algunos criadores ponen una gota pequeña de una mezcla a partes iguales de jalea real y agua destilada en el interior de cada copacelda, para ayudar a que la larva se adhiera al líquido y para prevenir la deshidratación de esta. Otros criadores traslarvan en seco con el mismo éxito. Es importante que si se usa jalea, se coloque a la larva flotando en la gota y no se le sumerja en ella para evitar ahogarla.
Para efectuar el traslarve, se usa una aguja o herramienta de transplante.
Existen muchos tipos de herramientas para el traslarve; algunas pueden ser adquiridas en casas comerciales y otras pueden fabricarse con materiales accesibles.
Las transplantadoras comerciales incluyen agujas, herramientas con una lengüeta que sale por la presión manual de un mecanismo para cucharear a las larvas. Lo recomendable es que cada apicultor pruebe varias de ellas y seleccione aquella con la que se sienta más cómodo. Las herramientas transplantadoras generalmente tienen un extremo plano en forma de cuchara (angulada hacia arriba unos 20º) de 1 mm de ancho por 2 mm de largo. Para hacer una aguja de traslarve, puede usarse alambre de bronce del número 8 (no de cobre, porque este metal puede reaccionar ante la acidez de la jalea real, lo que puede afectar a las larvas) como los electrodos para soldar. Se corta un tramo de unos 15 cm de largo y se redondea uno de los extremos, mientras que por el otro, con la ayuda de martillo, pinza, lima y lija fina, se fabrica la cucharilla para el traslarve.
La técnica del traslarve implica cucharear a la larva entrando con la cucharilla (o lengüeta de una transplantadora automática) de la aguja por su lado curvo y por debajo de ella. Posteriormente, la cucharilla con la larvita se levanta y se introduce al interior de la copa-celda, tratando de dejar la larva sobre el piso de esta con un movimiento hacia abajo y en la misma posición en que se encontraba dentro de la celdilla; si la volteamos, podríamos lastimarla. Cuando se han hecho los traslarves en todas las copas de una tira, esta se coloca con las celdas dirigidas hacia abajo dentro del bastidor contenedor y se hace lo mismo para todas las tiras. Una vez finalizado el traslarve, se introducen de uno a tres de estos bastidores en una colmena criadora.
La producción de celdas reales. Para producir celdas reales a partir de copaceldas conteniendo crías traslarvadas, se requiere de colmenas criadoras, las cuales contienen una colonia de abejas con o sin reina, pero siempre poseen al menos un cubo sin reina (separado de, y montado sobre otro cubo que contiene una reina, por medio de un excluidor de reinas). Estas colmenas sirven para desarrollar y/o incubar celdas reales. Las hay de tres tipos: iniciadora, finalizadora, o iniciadora-finalizadora.
Las colonias criadoras deben contener muchas abejas jóvenes y deben estar bien alimentadas con jarabe de agua y azúcar y con polen o sustituto de éste. Las abejas jóvenes producen más jalea real que las viejas y se requiere de alimento para estimular la producción de este nutritivo alimento, indispensable para alimentar a las larvitas destinadas a ser futuras abejas reinas.
Colmena criadora iniciadora. Una colmena iniciadora huérfana se prepara de la siguiente manera. A una colonia fuerte (en abejas y cría) se le alimenta diariamente con jarabe de agua y azúcar al 50% y con polen, o sustituto de polen, durante uno a tres días consecutivos. Si no se tiene polen, se puede hacer una pasta con harina de soya baja en grasa, humedecida con jarabe. Se proporcionan 200 o 300 gramos de esta pasta sobre los cabezales de los bastidores de la colmena. Terminado este tiempo de alimentación se quita la reina a la colonia. Un día después de quitar la reina, se sacan y reemplazan los panales de cría chica (excepto uno por cada bastidor con copa-celdas que se pretenda introducir) por bastidores con cría operculada procedente de otras colonias. Adicionalmente, se recomienda poner una rejilla excluidora de reinas por debajo del cubo de la cámara de cría y entre el excluidor y el piso de la colmena, poner una alza, con el fin de descongestionar la cámara de cría, para que las abejas más viejas (las pecoreadoras) tengan espacio suficiente y no promuevan el comportamiento de enjambrazón. El excluidor también sirve para evitar que se metan a la colonia criadora reinas o enjambres procedentes de otras colonias.
Veinticuatro a 48 horas luego de quitarle la reina a la colmena criadora, se introducen al centro de la cámara de cría, de uno a tres bastidores conteniendo entre 30 y 72 copa-celdas cada uno, hasta un máximo de 140 copas con larvas por colonia criadora, para tener una adecuada aceptación de estas. Las abejas de la colonia iniciadora alimentarán a las larvas e iniciarán la construcción de celdas reales a partir de las copa-celdas. El porcentaje de larvas aceptadas y de celdas reales construidas disminuirá conforme al número de celdas introducidas. Por ello, entre más celdas se metan, el porcentaje de larvas aceptadas y la cantidad de alimento que estas reciban será menor, con lo que se corre el riesgo de producir reinas de tamaño pequeño.
Cuando se introducen los marcos con las copa-celdas a las colonias iniciadoras es importante observar que no se utilice mucho humo, para no causar una fuerte desorganización de las abejas de la colonia y favorecer la aceptación de las larvas introducidas. Otra práctica que puede favorecer la aceptación de las larvas, es el rociar un poco de jarabe sobre los cabezales de los marcos recién introducidos, para atraer a las abejas a atender a nuestras larvas. Esta operación debe hacerse rápido y justo antes de cerrar herméticamente la colonia, para prevenir un problema de pillaje. Además de lo anterior, la manipulación e introducción de los marcos que contienen las larvas debe ser muy cuidadosa; no deben agitarse, golpearse, o sacudirse, ya que esto podría resultar en la pérdida o lesión de las frágiles larvas.
Algunos criadores calendarizan la introducción de un marco con copa-celdas cada día, mientras que otros los meten todos juntos. Estas calendarizaciónes obedecen más a adaptaciónes en los planes y rutinas de trabajo de los apicultores, que a las capacidades de las abejas y por ello son opcionales. Para atraer a las abejas nodrizas a alimentar a nuestras larvas, cada bastidor con copa-celdas se pone entre un bastidor de cría chica y otro que contenga polen. Estos bastidores se dejan en la colonia iniciadora durante uno a seis días, para luego ser transferidos a una colonia finalizadora. Dependiendo del calendario que se establezca, las colonias iniciadoras pueden estar recibiendo nuevos bastidores cada uno a siete días. Cada vez que se abra una colonia iniciadora, hay que proveerla con cría operculada (uno a dos bastidores), jarabe (2 a 4 litros) y buscar y destruir cualquier celda real que las abejas hayan iniciado a partir de cría que se le haya dado a la colonia con anterioridad. Hacer esto es muy importante para evitar que estas reinas criadas de emergencia, destruyan nuestras celdas reales con larvas seleccionadas y se pierda todo el trabajo hecho.
Colmena criadora finalizadora. Una colmena finalizadora es usualmente preparada con dos cámaras de cría. En la inferior se mantiene a una reina con toda la cría operculada, mientras que en la superior (separada de la inferior por un excluidor) se mantiene a la cría chica, bastidores conteniendo alimento (miel y polen), alimentadores y espacio para colocar bastidores con copa-celdas. En estas colmenas se introducen de uno a tres bastidores procedentes de una colonia iniciadora cada uno a seis días, dependiendo del calendario que se siga. Aunque la construcción de las celdas puede ser finalizada aquí, la principal función de estas colonias es la de mantener su temperatura en 32-35º C, por lo que también se les conoce como colonias incubadoras. Eventualmente pueden llegar a incubar hasta 300 celdas (seis a ocho bastidores). El arreglo de los panales en la cámara superior es similar al que se sigue en una colonia iniciadora y puede hacerse cada vez que se metan nuevos marcos con celdas reales, o cada cuatro días, lo que ocurra primero. Las celdas permanecen de cuatro a siete días en estas colonias, o hasta que cumplan 10 u 11 días luego del traslarve.
También pueden prepararse colmenas finalizadoras huérfanas, las cuales se manejan de manera similar a las iniciadoras. Cuando se transfieran celdas de una colonia iniciadora a una finalizadora, hay que manejar los marcos con mucha delicadeza, pero con rapidez, ya que un enfriamiento de las celdas puede derivar en un retraso en el desarrollo de las futuras reinas, o peor aún, en un inadecuado desarrollo de sus alas.
Las celdas ya operculadas (cinco a seis días después del traslarve) también podrían incubarse en una incubadora eléctrica a 32-35º C, hasta que cumplan 10 u 11 días.
Colmena criadora iniciadora-finalizadora. En el caso de colmenas iniciadorafinalizadora, estas se manejan igual que una iniciadora, pero proveyéndolas de dos a cuatro panales con cría operculada cada 10 a 11 días, para asegurar una constante provisión de obreras jóvenes. Adicionalmente se pueden sacudir abejas procedentes de otras colonias en su interior para mantenerlas fuertes. Desde luego, hay que alimentarlas con jarabe y con polen. La ventaja de estas colonias es el menor tiempo de trabajo y la menor manipulación de las celdas, pero la desventaja es un porcentaje menor de aceptación y producción de celdas reales. Las celdas permanecen 10 a 11 días en estas colmenas y luego se llevan a núcleos de fecundación o a colonias huérfanas.
Las colonias criadoras deben ser constantemente tratadas contra varroa y enfermedades de la cría, para evitar que se pierdan muchas celdas por concepto de enfermedades.
La cosecha y cuidados de celdas reales. Las celdas reales son cosechadas luego de 10 a 11 días de realizado el traslarve. Hay que sacar los bastidores conteniendo las celdas de las criadoras con mucho cuidado y con las precauciones antes descritas. Posteriormente, las celdas se desprenden de las tiras de los bastidores con la ayuda de un cuchillo o navaja filosos. Hay que tener el cuidado de no mantener las celdas mucho tiempo mirando hacia arriba, o de lado, para impedir que las alas de las reinas se adhieran a las paredes o a la base de las celdas y esto les impida salir, o bien salgan sin alas.
Valoración de celdas reales. Luego de ser despegadas, las celdas reales pueden valorarse por iluminación; muchas veces las larvas enferman y mueren dentro de la celda, o bien sus alas quedan pegadas a la pared de esta, o bien no tienen un buen desarrollo. Es posible detectar algunas de estas anomalías por medio de iluminar las celdas con una lámpara que emita una luz potente (de al menos 500 watts). La silueta de la reina se puede ver a contraluz, para determinar si esta tiene un buen desarrollo. La celda puede incluso moverse un poco entre los dedos pulgar e índice o bien puede ponerse de lado, para ver si la reina esta suelta (cambia de posición) o se balancea en el interior de la celda, lo cual es signo de que la reina está viva y sana.
Empaque y transportación de celdas reales. Las celdas reales son muy sensibles a golpes, enfriamientos y sobre calentamientos. Por eso hay que extremar precauciones en su empaque y transporte a los núcleos de fecundación o colmenas.
Es importante no exponerlas a corrientes de aire frío, así como a los rayos directos del sol. También hay que cuidar que durante la transportación no vayan golpeteando en el vehículo, especialmente cuando se transita por caminos con muchos baches.
Las celdas reales pueden transportarse en tiras de madera como las usadas para instalar las copa-celdas, donde son pegadas una detrás de otra, sin espacio entre ellas y estas tiras se colocan en un bastidor contenedor. Este bastidor puede meterse en una caja porta-núcleo (de dos o tres bastidores de capacidad) que contenga abejas sacudidas a fin de mantener una temperatura cálida para las celdas.
Cuando no se tienen abejas para mantener la temperatura de las celdas, se pueden poner en un cojinete de hule espuma o esponja que contenga agujeros, o bien en conos para transportar huevos, a los que se les perforan orificios en sus picos, para ahí alojarlas. Estos contenedores con las celdas se meten a una caja para protegerlas de corrientes de aire o de otras condiciónes climáticas indeseables.
Puede utilizarse una caja de cartón o de poliestireno (como las hieleras) forrada con hule espuma y una tela negra (para que absorba calor). En su interior, la caja es provista con una bolsa o botella con agua caliente (como las usadas en hospitales de color rojo), cuidando que las celdas no entren en contacto directo con ésta. En la caja se meten los conos de huevo, los cojinetes de hule espuma, o el contenedor que se haya utilizado para mantener a las celdas inmóviles y protegidas. Apicultores australianos usan cajas de poliestireno rellenas con algodón o aserrín, para ahí depositar las celdas. Alternativamente, la caja con el aserrín, pero sin la botella de agua caliente, puede meterse por varias horas a una incubadora, o por unos minutos a un horno de microondas, para calentar el aserrín antes de meter las celdas. El aserrín así calentado, mantiene una temperatura uniforme en todas las áreas de la caja. Una manera de saber si la caja lleva la temperatura adecuada (30-36º C), es colocando un termómetro en su interior y controlando con cierta periodicidad.
Una vez que las celdas han sido adecuadamente empacadas para su transporte, son llevadas a los núcleos de fecundación o a colmenas horfanizadas para ser introducidas. Idealmente no deben transcurrir más de 10 horas entre el empacado de las celdas y su introducción a los núcleos o colmenas. Cuando las celdas se pretendan introducir a colmenas, hay que preparar estas con anticipación, dejándolas huérfanas o haciendo divisiones para recibirlas. Ocasionalmente, celdas empacadas en cajas que guarden bien el calor, pueden mantenerse viables hasta por 24 a 36 horas.
La fecundación y cosecha de reinas. Para una adecuada fecundación de las reinas, el criadero (apiario con núcleos de fecundación) debe ubicarse en un lugar protegido de vientos, con árboles que den sombra y con diferentes estructuras naturales distribuidas a lo largo del terreno (piedras, árboles, montículos, matorrales, etc.), para ayudar a las reinas a orientarse mejor durante sus vuelos nupciales. Los núcleos de fecundación deben colocarse de una manera no uniforme y si es posible, se les debe pintar la piquera y el techo de distintos colores; todo esto con el fin de ayudar a las reinas y a las obreras a orientarse y a identificar su núcleo para no meterse en otro.
La producción y disponibilidad de zánganos. Es importante colocar colmenas que contengan panales con celdas de zángano en las cercanías del criadero. Algunas de estas colmenas pueden ubicarse dentro del criadero, mientras que otras pueden instalarse a distancias de entre uno y cinco km del mismo. Las colmenas productoras de zánganos, deben tener reinas seleccionadas para que produzcan machos de calidad. En general se recomienda instalar una colmena con dos panales con celdas de zánganos por cada 40 a 60 espacios de fecundación.
Para que las colonias produzcan muchos zánganos, es importante que tengan panales con celdas para zánganos y que sean constantemente alimentadas con jarabe y con polen. Los panales de zánganos pueden prepararse con anterioridad durante una floración, utilizando cuadros con una sola franja de cera estampada de 2 a 4 cm adherida al cabezal superior de bastidores sin alambre, los cuales son introducidos en colonias fuertemente pobladas para que los trabajen. Las abejas desarrollarán un panal conteniendo más celdas de zángano que de obrera, que pueden luego ser usados en las colmenas productoras de zánganos.
El manejo de los núcleos de fecundación. Las celdas reales se introducen en núcleos de fecundación para que ahí emerjan las reinas, se fecunden y regresen a poner huevos. Entonces son cosechadas. En términos económicos, es preferible trabajar con núcleos chicos, porque se gasta menos en abejas, equipo y alimento.
Sin embargo, mantener unidades pequeñas es más complicado que mantener unidades grandes. El tamaño del núcleo siempre será una decisión personal de cada criador. En general, es más fácil mantener núcleos pequeños en lugares calientes que en fríos, porque en lugares fríos se pierden más abejas debido a que las poblaciones pequeñas tienen más dificultades para mantener la temperatura de incubación en el nido de cría.
Para echar a andar los núcleos de fecundación, primero hay que llenarlos con abejas. Para ello se necesita traer abejas obreras de otras colmenas. Bastidores de colmenas bien pobladas se sacuden en el interior de una jaula de malla metálica ("canasta") con la ayuda de un embudo grande, o bien, primero se sacuden en el interior de una lata alcoholera y después las abejas se vacían en la canasta. Para impedir que las abejas vuelen mucho, hay que rociarlas con agua antes de pasarlas a la canasta. Una canasta puede contener las abejas sacudidas de hasta 60 o 70 bastidores. Se recomienda que a cada colmena de las que se sacudan, se les dejen al menos tres a cuatro bastidores cubiertos con abejas, para no debilitarlas mucho.
Antes de sacudir cada bastidor, es importante asegurarse que la reina no esté presente. Cuando se le encuentra, puede encerrarse temporalmente en una jaula y luego soltarse en su colmena, una vez concluida la operación. Las colonias que provean obreras, deberán ser alimentadas frecuentemente (de preferencia cada semana). Estas colmenas pueden proveer abejas (sacudirse) cada tres a cinco semanas. Las abejas en el interior de la canasta deben alimentarse con jarabe, para que cuando se sacudan en los núcleos, caigan fácilmente por su peso.
Un núcleo grande se llena con aproximadamente 1,200 a 1,500 abejas (150 gramos o un cucharón). Para calcular cuantas abejas llevar al criadero y por lo tanto, cuantos bastidores sacudir, se estima que un bastidor de cámara de cría puede contener alrededor de 3,000 a 4,000 obreras, pero considerando que muchas de las abejas vuelan y se regresan a su colmena, debemos estimar alrededor de 2,500 abejas, lo que sería suficiente para llenar dos de estos núcleos. Luego de que un núcleo es provisto con abejas, su alimentador se llena con jarabe denso (dos partes de azúcar por una de agua) y se coloca una celda real al centro del núcleo, sujeta entre los cabezales de dos bastidores, o entre los panales de cera, con el fin de protegerla cuando el lugar en que esté ubicado el criadero tenga un clima templado o frío. Posteriormente, el núcleo se cierra herméticamente y se le pone un tapón de madera o de cartón en la piquera, para impedir que las abejas sacudidas se salgan.
Las abejas se dejan encerradas durante cuatro días, al cabo de los cuales la reina ya debió haber emergido y estará lista para sus vuelos nupciales, mientras que para las obreras, el tiempo de encierro les sirve para reconocer a la reina y a su nuevo hogar, para no salir y perderse. El problema de núcleos vacíos debido a la pérdida de obreras por evasión, es mayor cuando se trabaja con abejas de origen africanizado.
La cosecha y cuidados de reinas. El criadero de reinas debe visitarse cada dos a tres semanas, dependiendo de los calendarios que establezca cada criador. Entre más corto sea el tiempo, se tendrá una mayor eficiencia en la producción de reinas, pero también se invertirá una mayor cantidad de abejas sacudidas. En cada visita deben llevarse abejas obreras para sacudir (en núcleos vacíos, débiles, o en aquellos en que la reina no pegó), celdas reales, alimento y jaulas para cosechar a las reinas fecundadas. Luego de abrir un núcleo, el apicultor deberá buscar huevos. Si los encuentra, esto es signo de que la reina fue fecundada. Entonces deberá buscar la reina e introducirla en una jaula de confinamiento (jaula Benton) junto con 10 obreras acompañantes, procedentes del mismo núcleo. Antes de introducir la reina a la jaula, podría pintarse su tórax o cortarse un ala. Para ello hay que sujetar a la reina entre los dedos pulgar e índice, colocados entre su tórax y abdomen. Existen también sujetadores de reinas que se venden en las casas de implementos apícolas. Luego de hecho esto, se introduce otra celda real y se alimenta y cierra el núcleo. Si le hicieran falta abejas, se le sacuden algunas de acuerdo al criterio del apicultor. Es preferible que en todos estos manejos se utilice poco humo y se trabaje rápido, para no tener los núcleos abiertos durante mucho tiempo. También es importante cuidar de no regar jarabe fuera de los núcleos, para prevenir el pillaje. El pillaje es el principal problema en los criaderos y puede influir mucho en reducir la productividad de los mismos.
Las reinas cosechadas pueden guardarse temporalmente en un banco de reinas, que es una colonia huérfana muy poblada y bien alimentada y que tiene un excluidor entre el piso y la cámara de cría, para evitar que se metan enjambres o reinas procedentes de otras colonias. Los bancos de reinas pueden guardar varios cientos de ellas si se les provee con dos bastidores de cría operculada cada semana y se les alimenta frecuentemente. Las reinas que se metan a un banco deberán ir sin obreras acompañantes y sin candy (pasta de azúcar glass y miel que llevan las jaulas Benton). Existen contenedores especiales, o marcos adaptados para contener a las jaulas de reinas en el interior de una alza que se coloca sobre la cámara de cría del banco. Aunque las reinas pueden permanecer muchas semanas en un banco, no es recomendable que se mantengan en este por más de un mes, ya que el confinamiento prolongado lleva a la involución de sus ovarios, lo cual puede afectar su postura posterior. Cuando se vayan a vender o a transportar, las reinas deberán transferirse a jaulas que contengan obreras acompañantes (del banco) y candy.

VIII. LA INTRODUCCION DE REINAS EN COLONIAS PARA PRODUCCION
Jaulas de transporte e introducción. Se han probado varios métodos de introducción de reinas, pero ninguno ha sido más eficaz que el método tradicional de la jaula de transporte con candy (Benton de madera o de plástico). Estas jaulas pueden adquirirse en casas de implementos apícolas, o pueden fabricarse. Las jaulas de madera poseen tres compartimientos circulares, dos de los cuales sirven para alojar a la reina y sus obreras acompañantes, mientras que el restante sirve para contener el candy. El candy puede prepararse con 1 kg de azúcar pulverizada (glass) y 250 a 300 gramos de miel procedente de una colonia sana, o bien con jarabe de maíz. La mezcla se amasa hasta que quede una pasta ni muy dura ni muy blanda.
También puede agregarse a esta mezcla unas gotas de glicerina para ayudar a que el candy no se seque demasiado pronto. Si las reinas tardarán varios días en introducirse, hay que hacer la pasta un poco más blanda para evitar su deshidratación. Sin embargo, hay que cuidar que no sea excesivamente blanda, porque cuando hace mucho calor, el candy puede reblandecerse y chorrearse, matando a la reina. Si por el contrario es muy duro, las abejas no pueden comérselo en pocos días y la reina puede morir al no ser liberada, luego de ser introducida en una colmena. A las jaulas ya preparadas con candy se les engrampa una malla mosquitera fina. Las mallas muy abiertas pueden favorecer la agresión de las abejas de la colonia receptora, las cuales a veces muerden y lesionan las patas de la reina.
El transporte y envío de reinas. Cuando se transporten reinas dentro de jaulas a otras localidades, hay que tener algunas precauciones básicas que deben tomarse para asegurar que lleguen bien a su destino. Como ya se dijo, las jaulas deben contener obreras acompañantes y candy para que la reina sea alimentada. Cuando se envían varias reinas, las jaulas pueden fijarse unas con otras con listones de madera delgados engrapados a sus costados. Al hacer esto, hay que tener la precaución de que las mallas de jaulas contiguas no queden una frente a la otra.
Antes de ser enviadas, se pueden dar a las abejas unas gotitas de agua embarradas sobre la malla. El paquete debe incluir una leyenda que especifique que se trata de abejas reinas vivas y que no deben exponerse al sol o lugares calientes. Los servicios de mensajería suelen realizar estos envíos delicados. Las reinas pueden permanecer viables dentro de jaulas de transporte hasta por 10 a 12 días, pero es preferible que se metan en colmenas en el menor tiempo posible.
La introducción de una nueva reina. Para introducir una reina nueva, primero hay que buscar y eliminar a la reina de la colonia receptora. Para hacerlo, hay que abrir la colmena usando poco humo, e ir sacando panal por panal, revisarlos cuidadosamente por ambas caras y ponerlos recargados en una pared externa de la colmena. A veces las reinas se encuentran en las paredes interiores de la colmena, o bien suben a las alzas. Si la reina no se localiza en la cámara de cría, hay que sacudir las alzas sobre un techo telescópico invertido y previamente colocado sobre el suelo. Esta es la manera más rápida de localizar una reina que se encuentra en las alzas. Algunos apicultores esperan de 24 a 48 horas después de haber horfanizado a la colonia antes de meter a la nueva reina, pero nadie ha demostrado que esto sea mejor a hacerlo inmediatamente después de eliminar a la reina vieja.
La jaula debe colocarse entre dos bastidores del centro del nido de cría, con la malla mirando hacia arriba y ligeramente inclinada, con el candy más hacia el interior de la cámara de cría. Las abejas de la colmena liberarán a la nueva reina en dos a cinco días (comiéndose y haciendo un túnel a través del candy), al cabo de los cuales la reconocen como suya y la aceptan en la mayoría de las ocasiones (90% de las ocasiones). Las colonias que reciban reinas nuevas, deberán ser alimentadas con jarabe y ser revisadas nuevamente en un lapso de 10 a 20 días, para verificar que la reina haya sido aceptada y esté poniendo, o bien para re introducir otra reina, o dejar las celdas reales que las abejas hayan construido, en caso de que la reina no haya sido aceptada.
La aceptación de las reinas aumenta en colonias poco pobladas y con abejas jóvenes, en relación a colonias muy pobladas y con abejas viejas. Por ello, se tiene más éxito cuando se meten reinas en divisiones, especialmente si estas se mueven a otro lugar alejado de las colonias que las generaron, lo que hace que las abejas viejas regresen a sus colmenas originales, dejando las divisiones con abejas jóvenes.
La introducción de celdas reales. Cuando se cambian reinas con celdas reales, se siguen los procedimientos arriba descritos para eliminar a la reina vieja de una colmena, o se preparan divisiones para tal efecto. La celda debe colocarse sujeta entre dos panales del centro de la colmena, de preferencia en el medio de los mismos. Pueden usarse dos celdas reales para asegurar que por lo menos una de las reinas emerja, sobre todo si no se le dio un manejo de transportación muy adecuado a las celdas. Cambiar reinas con celdas reales puede ser muy económico y sin duda la aceptación será mayor que con reinas enjauladas. Sin embargo, es de suma importancia recalcar que si las celdas no se manejan correctamente, o si transcurre mucho tiempo entre su cosecha y su introducción a las colmenas receptoras, se correrá el riesgo de quedarnos con muchas colonias huérfanas y debilitadas. Para estar seguros que las reinas procedentes de celdas reales funcionaron, hay que revisar las colmenas en donde se metieron, entre 18 y 25 días posteriormente a su introducción. Tres semanas es un tiempo razonable. Si se encuentran huevos, es indicio que una de las reinas emergidas de las celdas reales fue aceptada y se fecundó. En este marco de tiempo solo una reina de las introducidas podría estar poniendo. Si no hay huevos, se asume que ninguna reina pegó y entonces habrá que tomar otras medidas para no perder la colonia de abejas.